El ecosistema financiero en México está en constante evolución y actualización. De cierta manera, podemos decir que son las instituciones bancarias las que están siempre a la vanguardia de la tecnología, ya se en cuestión de seguridad como el desarrollo de nuevas herramientas y servicios para los usuarios. Sin embargo, esta evolución no pudo ser posible sin la llegada de un grupo de pequeñas start-ups que han logrado acaparar la atención de estos titanes financieros. Estamos hablando precisamente de las FINTECH’s.
Mucho se ha escrito sobre ellas, de cómo buscan crear tecnologías innovadoras que sean del gusto y uso del usuario, así de como facilitar el acceso a financiamiento a proyectos que quizá los grandes bancos ni siquiera considerarían por su tamaño o nivel de riesgo. De aquí que uno de los temas más complejos de discusión regulatoria venga de un nicho en específico de las FINTECH: las “Fondeadoras”
De acuerdo a su esquema de negocio, estas Fondeadoras se pueden clasificar en 3 tipos: aquellas que ofrecen una participación en el proyecto, aquellas que ofrecen un interés sobre el monto de la inversión que se recuperara y las aquellas que ofrecen el producto terminado como premio a su inversión. Este último esquema es quizá el más común que difícilmente sería tema de una regulación muy extensa. Sin embargo, los primeros dos esquemas si presentan un tema un tanto delicado, ya que, para la autoridad, estas Fondeadoreas estaría funcionando como brokers o hasta casas de bolsa, al ofrecer activos muy similares a acciones o bonos de deuda.
Si bien existe un proyecto de regulación rondando, este no es aún público o se ha presentado ante comisiones de revisión o las propias cámaras legislativas, por lo esta columna debería tomarse como especulativa.
Si la autoridad competente (CNBV, SHCP, CONDUSEF) exigiera algún tipo de regulación, ¿cuál sería el inicio? Debemos recordar que uno de los ejes de estas autoridades, es la protección al usuario de servicios financieros, por lo que la idea de tener inversiones las cuales no cubren o no llegaran a cubrir parámetros mínimos de riesgo, podría causar algún tipo de daño al patrimonio de usuarios. Pero, ¿realmente sería necesario aplicar las mismas reglas rigurosas que acatan las casas de bolsa, a las Fondeadoras? Consideramos que esto sería un retroceso que estancaría y haría menos atractivo este método de fondeo a proyectos que muchos bancos pasarían por alto, ya sea por un tema de viabilidad o de riesgo. Si bien es cierto, que debe haber una protección al usuario, creemos viable que se establezca mejo run perfil de inversión. Es decir, así como aplica la banca a identificar perfiles de inversión (agresivo, medio, bajo), creemos que el identificar proyectos de alto riesgo y solo presentarlo a inversionistas agresivos, así como sus respectivas advertencias, debería ser mas que suficiente para poder mantener la flexibilidad de las Fondeadoras sin necesidad de convertirlas en híbridos o casa de bolsa formales.
Consideramos que el tema de los perfiles podría ser una buena herramienta que ayudaría a mitigar riesgo, así como proteger al usuario y a la misma Fondeadora de alguna contingencia.
En Gloria Ponce de León y Hernandez, hemos tomado especial interés en estos temas, ya que consideramos que las FINTECH representan una alternativa a las personas que carecen de un acceso real a los sistemas financieros tradicionales.